El mundo del running es emocionante y gratificante, pero incluso los corredores más experimentados a veces se encuentran con un desafío post-entrenamiento: las temidas agujetas. Estas molestias musculares, técnicamente conocidas como dolor muscular de aparición tardía (DMAT), pueden aparecer entre 24 y 72 horas después de un entrenamiento intenso o una carrera, dejándote con sensaciones de dolor y rigidez que pueden desalentarte.
Las agujetas no son exactamente una inflamación en sí mismas, pero pueden estar asociadas con un proceso inflamatorio en los músculos. Cuando haces ejercicio, especialmente si es una actividad intensa o a la que no estás acostumbrado, se producen pequeñas lesiones en las fibras musculares. Esto puede desencadenar una respuesta inflamatoria natural del cuerpo para reparar y fortalecer los músculos.
A continuación te proporcionamos una pequeña guía para tratar y aliviar las agujetas después de correr
Descanso y recuperación
El descanso es crucial para permitir que tus músculos se reparen y se fortalezcan. Si experimentas agujetas, considera tomar un día de descanso activo, como caminar suavemente o hacer estiramientos ligeros para mantener el flujo sanguíneo y ayudar en la recuperación.
Hidratación y nutrición adecuadas
El agua es tu aliada. Mantente hidratado para ayudar a tus músculos a recuperarse más rápido. Además, asegúrate de mantener una dieta equilibrada rica en proteínas, vitaminas y minerales para apoyar la reparación muscular.
Masajes y estiramientos
Los masajes suaves pueden ayudar a aliviar el dolor muscular y mejorar la circulación sanguínea. Considera utilizar rodillos de espuma o buscar ayuda profesional para un masaje terapéutico. Los estiramientos suaves también son beneficiosos para liberar la tensión en los músculos.
Y recuerda: ¡debes visitar al fisio frecuentemente para evitar sobrecargas!
Terapia de frío y calor
La aplicación de hielo puede reducir la inflamación y el dolor. Aplica una compresa fría en el área afectada durante 15-20 minutos varias veces al día. Después de 48 horas, la terapia de calor suave, como una ducha caliente o una compresa caliente, puede ayudar a relajar los músculos y mejorar la circulación.
Actividad física moderada
Realizar actividades físicas de baja intensidad, como yoga o natación, puede mejorar el flujo sanguíneo y ayudar en la recuperación sin sobrecargar los músculos afectados.
Prevención para futuros entrenamientos
Para evitar agujetas en el futuro, asegúrate de calentar adecuadamente antes de correr, estirar después del entrenamiento y aumentar gradualmente la intensidad y duración de tus carreras.
Consulta a un profesional de la salud
Si el dolor persiste o empeora significativamente, busca la opinión de un profesional de la salud, como un fisioterapeuta o un médico deportivo. De esta forma, podrás descartar lesiones más graves.
No obstante, recuerda que las agujetas son una parte común del proceso de entrenamiento para los corredores. Sin embargo, con los cuidados adecuados, puedes minimizar su impacto en tu rutina de running. Recuerda, escuchar a tu cuerpo es fundamental. Dale tiempo para recuperarse y siempre busca equilibrar el desafío con el descanso. ¡Sigue corriendo y preparando las siguientes carreras populares en Valencia!